Ciencias de la Educación

24 de julio de 2017

De la teoría a la práctica

Al observar el comportamiento de un carrito deslizarse por un plano inclinado y tomando como punto o marco de referencia el punto desde el cual toma su desplazamiento horizontal las estudiantes toman sus datos del tiempo que gastan en desplazarse 10 cm, 20 cm, 30 cm y así sucesivamente hasta alcanzar una distancia de 120 cm.

José Yury Delgado Rodríguez

El Liceo Femenino Mercedes Nariño cuenta con un alto porcentaje de estudiantes de estrato 0, 1 y 2 y pocas de estrato 3. Esta ubicado en la localidad de Rafael Uribe Uribe, su población en las tres jornadas, supera las cinco mil estudiantes y la planta docente esta alrededor de los doscientos maestros.

La clase que se desarrolló fue en torno a una práctica de laboratorio, tomando como eje central el movimiento rectilíneo uniforme para el grado décimo, concretamente en 1001.

La actividad se organizó en tres momentos esenciales: Introducción (explicación breve de las instrucciones a seguir), desarrollo del experimento (manejo de los instrumentos y toma de datos) y conclusiones. Al observar el comportamiento de un carrito deslizarse por un plano inclinado y tomando como punto o marco de referencia el punto desde el cual toma su desplazamiento horizontal las estudiantes toman sus datos del tiempo que gastan en desplazarse 10 cm, 20 cm, 30 cm y así sucesivamente hasta alcanzar una distancia de 120 cm. Al hacer 3 repeticiones de cada medida en la distancia, se saca un promedio que nos facilita encontrar (teniendo en cuenta el tiempo y la distancia) la velocidad. Dicha velocidad encontrada (en base a la teoría: V = X / T) debe ser igual en cada uno de los desplazamientos (velocidad constante). Con esta práctica y otras más, la estudiante debe afianzar por completo los conceptos de: sistema de referencia, posición, desplazamiento, trayectoria y velocidad y como valor agregado el desarrollo de habilidades, el aprendizaje de técnicas elementales y la familiarización con el manejo de instrumentos y aparatos.

Estas prácticas de laboratorio son motivantes porque las estudiantes se centran en el objetivo principal de la actividad: comprobar las teorías y desarrollar destrezas cognitivas.

Es una propuesta atractiva para ellas porque despierta la curiosidad y el deseo de apropiarse del conocimiento a través de la práctica. La práctica de laboratorio puede tomarse como una estrategia didáctica para lograr un proceso de enseñanza-aprendizaje donde realizan acciones psicomotoras, sociales y de práctica de la ciencia, a través de la interacción con equipos e instrumentos de medición, el trabajo colaborativo y la solución de problemas. No necesariamente para captar el interés entre las estudiantes se debe plantear una clase en la que se incluyan juegos o herramientas TIC, aunque es indiscutible que se debe plantear un tema llamativo, pero la forma en que lo hacemos, el lenguaje que utilizamos, el momento e incluso el interés por la materia de las estudiantes nos permiten realizar actividades que propician la participación y favorecen el aprendizaje; este grupo seleccionado 1001 se ha caracterizado por la atención especial que prestan en los distintos contenidos que hemos visto hasta el momento en la materia de física.

Gracias a la práctica de laboratorio las estudiantes se apropiaron de las características que identifican al movimiento rectilíneo uniforme. Podemos decir entonces que las estudiantes lograron llevar la teoría a la práctica.