17 de noviembre de 2016
Ruta de indagación curricular
Una de las grandes dificultades presentadas en el día a día del docente de lenguaje es superar algunas barreras presentadas en la construcción de la lectoescritura con estudiantes de educación básica. Estar preparado con estrategias pedagógicas puntuales para los posibles problemas y dificultades enfrentados por los estudiantes es fundamental. Por esto, el objetivo de este texto es presentar algunas de estas estrategias que puedan ayudar a los docentes a la hora de pensar sobre los procesos de aprendizaje de sus estudiantes.
Profesor: Javier Caballero Sánchez
Monitor: Juan Carlos Cubillos
El trabajo de análisis curricular realizado durante los últimos años en el seminario de teorización se ha estructurado en el marco del proyecto pedagógico de la Facultad que incluye como uno de los principios “La formulación de currículos abiertos de formación, con dinámica propia y articulados a la investigación como fuente de saber y de aprendizaje”. Como resultado de este proceso hemos consolidado la siguiente herramienta de indagación curricular.
Esta herramienta connota un proceso dinámico en el cual se propone a los estudiantes elegir un “asunto de indagación” sobre el que deciden profundizar en pequeños colectivos. Indagar tiene que ver con estar atentos, profundizar en la relación entre prácticas y currículo, y entender su complejidad.
Gráfico: Ruta de indagación¹
La ruta, como lo muestra el gráfico, inicia con la elección de un tema y una pregunta de indagación. Para ello, se dan a conocer trabajos destacados producidos por estudiantes de semestres anteriores con el ánimo de mostrar los posibles caminos que podrían orientar su elección. Asimismo, se van abordando aspectos teóricos que enriquecen la selección del asunto a indagar. Algunos de los referentes teóricos han sido: el profesor como investigador desde Stenhouse (2007), el currículo en la agenda del 2030 de Opertti (2016), las unidades didácticas integradas desde Jurjo Torres (1996) y Carbonell (2015), entre otros.
Una vez delimitado el tema y la pregunta de indagación, se someten a un proceso de orientación con el ánimo de cuestionar, replantear o reafirmar lo propuesto. A la par de la fundación teórica se construye una propuesta metodológica para despejar el interrogante. Esto se realiza mediante un sistema categorial de indagación. Este sistema, en palabras de Aristizabal & Galeano “Se constituye en una brújula que orienta el diseño de instrumentos, la recolección y generación de información proveniente de múltiples fuentes”(Aristizabal & Galeano, 2008, p. 164)
Poco a poco la ruta se va nutriendo con diferentes propuestas entre las que se destaca la de Posner que expone un conjunto de cinco elementos para el análisis curricular. Aunque, como advierte el mismo Posner “rara vez se requiere un análisis curricular completo y detallado de los cinco grupos de preguntas” (p.23) Cada uno de estos modelos, visto de manera exclusiva, ha sido insuficiente para bosquejar esta ruta. Contextos como los de las escuelas inclusivas, la educación rural o los modelos educativos flexibles han exigido caminos alternos para generar comprensiones relevantes sobre el asunto de indagación.
En el aspecto metodológico, la indagación ha permitido a los estudiantes afrontar de manera real y concreta las dinámicas particulares de los proyectos de investigación que incluyen el análisis del currículo. En algunas experiencias se ha recurrido a la revisión documental, el uso de diarios de campo, encuestas, entre otros. Este proceso enfrenta a los estudiantes a situaciones que posteriormente les servirán para cualificar el diseño de sus proyectos. Por ejemplo, el hecho de realizar un ejercicio de elaboración de instrumentos y de esta manera, “aprender desde el error”.
Esta experiencia ha permitido conocer cuáles son las concepciones de los maestros sobre el currículo en general, y de manera particular profundizar en temas relacionados con las concepciones sobre lectura y la escritura. Asimismo han sido objeto de análisis las propuestas de Reorganización Curricular por Ciclos y Currículo 40×40 en Bogotá, y otras como el uso de materiales educativos, planeación de clase, adaptaciones curriculares en el marco de los programas de inclusión, entre otros.
Un elemento final que involucra la indagación es la escritura y presentación final del trabajo, algunos de los cuales alcanzan el nivel de un ejercicio investigativo. Su desarrollo ha contribuido a los proyectos de investigación afianzando los marcos de referencia al tiempo que fomenta la revisión crítica de sus propuestas curriculares. De igual manera se destaca el análisis del currículo en las políticas educativas (lineamientos curriculares, estándares básicos de competencias, orientaciones pedagógicas) y recientemente los Derechos Básicos de Aprendizaje –DBA-.
Los avances de esta experiencia fueron socializados el año pasado en el Coloquio: “Pedagogía, currículo y aprendizaje” convocado por la Secretaría de Educación del Distrito en el marco del programa de formación posgradual. La puesta en común nos animó a continuar la ruta y recorrer el camino que hemos compartido.
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Proyecto Académico de la Facultad de Educación, 2011.
Referencias
Aristizabal, M. N., & Galeano Marín, M. E. ¿Cómo se contruye un sistema categorial? En N. Aristizabal, & M. E. Galeano Marín, ¿Cómo se contruye un sistema categorial? Medellín, Antioquia, Colombia.
Carbonell S. Jaume (2015) Capítulo “las pedagogías del conocimiento integrado, los proyectos de trabajo” en “Pedagogías del Siglo XXI”.
Opertti, Renato (2016) El currículo en la agenda educativa 2030, en “Currículo para transformar la Educación”.Ruta Maestra. Santillana.
Posner, George (2007). Análisis del currículo. México: McGraw-Hill Interamericana.
Stenhouse, Lawrence. (2007). Investigación y Desarrollo del Curriculum. Ediciones Morata, Madrid.
Torres, Jurgo. (1996). Globalización e interdisciplinariedad: el currículo integrado. Madrid.Ediciones Morata.